Quienes controlan mucho la liga ACB creen que esa competición es la mejor del continente y que los mejores equipos europeos militan en ella. El papel lo aguanta todo, pero la realidad, como siempre, la determinan los resultados en la cancha. Como sucede en toda competición doméstica, a veces hay encuentros infumables que alejan al espectador. Ahora que se disputa la Euroliga, la cosa cambia. Y bastante!.
Ocho equipos pelean por clasificarse para la final four, torneo a cuatro que determinará al campeón. La cita se anuncia en Barcelona. Allí llegarán los mejores. Estamos en plena efervescencia. Salimos de los terceros encuentros y vamos mañana a por los cuartos que pueden ser definitivos, porque el que consiga tres triunfos habrá dado el pase de gigante.
El Baskonia se encuentra en Tel Aviv con desventaja (2-1) ante el Maccabi que en su cancha y ante su enfervorizado público se transforma y se hace irreductible. Si los vitorianos ganan, habrán conseguido la hazaña de recuperar el factor cancha y la posibilidad de jugársela ante su afición. Pero antes del quinto, la final corresponde al cuarto y ésta se resuelve esta noche. Si gana el equipo israelí será una vez más de la partida entre los mejores. Si pierde, las opciones alavesas crecen como la espuma.
Los griegos son competitivos y en sus pabellones arrasan. El Panathinaikos se le atraganta al Barça, actual campeón del torneo. Los de Xabi Pascual llevan la misma vida que el Baskonia. Ganar o morir, con el agravante para los catalanes de que el torneo que determina al campeón se disputará en la Ciudad Condal. Es impensable que no estén, pero lo cierto es que una victoria de los helenos les elimina de la competición.
De Valencia o Madrid sale un finalista seguro, porque se enfrentan el Power Electronics y el conjunto blanco, que no es fiable. Su técnico Messina dimitió hace unas semanas porque todo le parecía imposible. De la mano de su segundo Molin hacen cosas, pero no cautivan. Llevan ventaja y si ganan este jueves también se clasifican. Quizás nadie les esperaba a tenor del raro comportamiento que llevan toda la temporada, pero…Por cierto, su entrenador se mete en chacos y "gana puntos" en sus declaraciones después de la victoria en La Fonteta: "Estoy contento, pero hay que cambiar la actitud".
Quien más llama la atención es el Montepaschi de Siena que hizo el ridículo en el primer partido de la eliminatoria frente al Olimpiakos, que le metió un tarantantán en El Pireo (89-41), pero que luego ha vencido en las dos siguientes comparecencias. Si consigue un nuevo triunfo este jueves ante los griegos, también será uno de los cuatro finalistas. Por tanto, mañana a estas horas sabremos qué ha sucedido, quiénes se disputarán el cetro europeo y en qué despachos se llevan un disgusto de campeonato.