Un capitán sin barco, pero con cocina…(Vigo)

El viaje a Vigo esta vez fue raudo y veloz. La disputa de la Vuelta Ciclista al País Vasco me ha añadido más horas de directo a mi trabajo y me ha apretado bastante el desplazamiento a la ciudad gallega. Madrugué mucho para llegar a comer. Me esperaban "los enviados especiales" habituales a quienes se unieron Xabi Andueza y Loyola Altuna, los "compis" de la tele que vinieron a transmitir el partido frente al Celta. Cuando llegan nuevos comensales la conversación se amplía y las posibilidades de éxito aumentan notablemente.

Nos reímos bastante. Juntarnos antes de los partidos, lo facilita. A veces corremos el riesgo de cabrearnos con el resultado y no hay cena, ni nada. Y si la hay, estamos de morros. Como les dio tiempo de patear y  tomar el aperitivo, se fijaron en "El capitán", un mesón restaurante situado en la Calle Triunfo. Muy cerca de La Piedra, junto a la catedral y a nada de la Puerta del Sol. Allí me llevaron. Sin rechistar porque habían tocado las campanas de las dos y media.

No habíamos reservado, pero nos hicieron un hueco, más bien huecazo, porque nos sentamos en una mesa redonda con seis cubiertos, cuando éramos cinco. Así me gusta, ancho y sin apreturas. El resto estaba lleno. No hay mucho sitio y conviene antes pegar un telefonazo para asegurarnos. La tradición manda compartir unos primeros y elegir el segundo. Así se hizo.

La señora que nos atendió fue muy amable. Gallega hasta las cachas. Apuntó en su cuaderno: Pulpo, Empanada de Xoubas, Almejas en salsa…Luego, me apunté al rape. En poco tiempo debo transmitir y la elección debe ser ligerita. Doble propuesta: "a la plancha" o "a la gallega". Me apetece comer "cachelos" con pimentón. Quiero la receta que los traiga. "Los dos", respondió la señora. Profundicé un poco…"¿Usted cuál se comería?". "Los dos están muy buenos…", ratificó. Sólo a mi se me ocurre hacer una pregunta en esta tierra y esperar una respuesta convincente. Finalmente, ¡a la gallega!. Cojonudísimo, por cierto.

El resto se decantó por una vieiras con arroz y langostinos, lenguado y creo que merluza. De pimple, un par de botellas de Albariño. Sin postre, café. Antes, un par de cestos de muy buen pan con el que untamos y dejamos a buen recaudo la salsa de las almejas. En la mesa más cercana a la nuestra una pareja de enamorados eligió una excelente bandeja de mejillones y un guiso muy tradicional de "Pata de ternera con garbanzos". Otros comensales no ocultaban ponerse las botas con ostras y todo tipo de mariscos. ¡Abril es un mes "con r"!.

Me quedé a gusto. El remate lo daría el precio. Conociendo el tiempo que corre, me pareció más que razonable. Eso que tanto se dice de la relación calidad-precio, aquí se cumple a rajatabla. Quizás el único "pero" que podamos ponerle es que tardaron un poco entre los primeros y el segundo.  Por eso, no nos quedó "colchón" para un descansito antes de Balaídos.

Ya saben que empatamos. A la noche, terminamos en la Jamonería Compostela, sita en la plaza del mismo nombre. Queríamos ver el Recre-Barça y aquí puedes picar bien mientras sigues el encuentro en una pantalla grande. La primera copa nos la tomamos en "Varadero" que siempre está lleno. Y las siguientes no pertenecen a esta sección.

Datos de la ubicación:

Restaurante Mesón El Capitán
Calle Triunfo, 5 
36202 Vigo – Pontevedra

Teléfono: 986 220 940