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Al asalto de un barco que no cede

Hace tres meses salió un barco desde Barcelona dispuesto a dar la vuelta al mundo en dura competencia con sus rivales. Iker y Xabi son sus patrones y aspiran a la victoria final desde la segunda posición que ahora mismo ocupan. No va a ser fácil. A esta hora su destino es el Estrello de Gibraltar, pero antes deberán superar las islas Canarias, bien por fuera, bien por la cercanía de la costa africana. Es una cuestión de estrategia y decisión, constantes que les han acompañado a lo largo de la experiencia.

Han estado un par de días en "modo oculto", es decir, sin que nadie supiera nada de ellos salvo la organización. Cumplidas las 48 horas reglamentarias han reaparecido después de recortar 33 millas a sus oponentes líderes, los franceses del VIRBAC PAPREC 3, Jean Pierre Dick y  Loïck Peyron a menos de 1.400 millas para la llegada. También los galos activaron el "modo oculto" porque ninguno de los dos quería enseñar sus cartas, ni mostrar sus intenciones sobre el modo de afrontar la influencia del anticiclón situado al oeste de las Canarias. "Cada vez que nos acercamos aprietan y se escapan", señalaba Iker en una de sus últimas declaraciones.

Iker Martínez y Xabi Fernández han conseguido reducir la diferencia en 33 millas, es decir cerca de un 12% más de efectividad en su aproximación al estrecho de Gibraltar. Durante las próximas horas, los patrones del "MAPFRE" tendrán que decidir si siguen con rumbo Norte o, por contra, viran hacia el Este para aproximarse al archipiélago canario. Esa es la cuestión. Se intuye que luego en la zona del estrecho habrá suficiente mambo como para aprovecharse del tráfico habitual de embarcaciones. Cualquier despiste otorga el campeonato o te lo quita.

Paralelamente se sabe que las provisiones son pocas, que los dos pilotos han debido racionar mucho la comida porque esta se agota. Mucha se les ha estropeado. Están más flacos que nunca. De cualquier modo, la ilusión por la posible victoria y la cercanía de la meta otorgan las fuerzas que faltan:

"Nos quedan un par de cartas por jugar y la primera será el paso por Canarias. Será un paso decisivo, que si sale bien habrá una nueva batalla y si nos sale mal los franceses se irán definitivamente. Obviamente hay que hacer algo coherente, no una locura. Hay que meditar muy bien los riesgos que implicarían una alternativa u otra, tienen que ser comedidos, meditados, esperar a ver cuándo haya opciones y tomar decisiones con cabeza", afirmó Iker Martínez en su declaración. La primera semana de abril, cuando lleven casi cien días de navegación llegarán a puerto. ¿Primeros o segundos?. Los franceses no ceden.

 

 

Iñaki de Mujika