Amets es un sueño

Amets Txurruka es un buen ciclista que cuenta con el fervor popular y el cariño de los aficionados. Acaba de ganar la primera carrera de su vida, la Vuelta a Asturias. “Me estaba haciendo a la idea de que tendría que dejar la bici sin conseguir una victoria” afirmó después del triunfo. Triunfo celebrado y compartido con sus gentes en Etxebarria.

Quienes mejor le conocen saben lo que ha sufrido en su trayectoria. Muchas carreras, muchas fracturas de clavícula, muchas decepciones. Caerse y volver a levantar. Tantas veces.

Al final de la pasada temporada debió salir del equipo de toda su vida. Por decisiones que costó entender a la mayoría, Amets abandonó el naranja de Euskaltel Euskadi para recalar en Caja Rural. Cambiaba de aires, pero no perdía ni su condición de ciclista ni el apoyo de sus incondicionales.

Ya en la Vuelta al País Vasco se reivindicó como ciclista, si es que lo necesitaba. Destacó en jornadas dantescas en las que el frío y la lluvia exigían entrega y resistencia. Salió con buena nota y reforzó las tesis de quienes entendían que la decisión que en su momento se adoptó no se justificaba en exceso.

Ahora va y gana en Asturias. Un sueño cumplido, como su nombre. Suma puntos en la clasificación personal que le vendrán muy bien para reforzar su autoestima y continuar el nuevo camino. Amets afirma que sigue siendo el mismo corredor de siempre, pero con más aplomo y tranquilidad. Se quita una espina que tenía clavada, porque ya puede presumir de triunfos.

Como es un buen chico y el rencor no anida en su corazçon, no aprovecha el momento para reivindicarse, porque no lo necesita. “No tengo que demostrar nada a nadie. Tengo que demostrarme a mí mismo y dar el máximo”, afirmó el ciclista vizcaino tras el triunfo.

Amets comparte este momento de alegría con quienes le han apoyado en los peores momentos que son aquellos en los que se conoce a las personas. Por eso, en situaciones como ésta la afición se siente reconfortada. Lo mismo que el entorno y la profesiçon que da sentido a un deportista que transmite valores.