Iñaki de MujikaPor Ángel López – El mundo deportivo
Contador inagotable de anécdotas, relató los éxitos de la Real y del Bidasoa durante tres décadas con un estilo muy personal
‘Mujika, maestro’. El periodismo guipuzcoano está de luto por la muerte de Iñaki de Mujika, histórico locutor de radio y redactor, que falleció el pasado viernes a los 72 años en su domicilio de Hondarribia. Los compañeros de Noticias de Gipuzkoa esperaban su columna habitual tras los partidos de la Real, que se llamaba ‘El beaterío’ y en las que aludía a la música o la gastronomía, pero nunca llegó. La careta de su diario programa de Radio Popular y Onda Vasca ‘La movida deportiva’ incluía ese ‘Mujika, maestro’ y terminaba con un inolvidable ‘…y que corra el atleta’.
De Mujika fue presidente del Real Unión, además de narrador de los éxitos de la mejor etapa del Club Deportivo Bidasoa de balonmano y y, por supuesto, de la trayectoria de la Real en las tres últimas décadas. Era un periodista riguroso y cercano, con un estilo muy personal de contar, y un gran anfitrión y cicerone para los informadores que querían hacerse un sitio en la profesión, como su contemporáneo Pato Reizabal, que también falleció recientemente. Muchos crecieron escuchando sus narraciones en el transistor.
Tenía la virtud Iñaki de hacer que sus protagonistas de su programa de radio charlaran con él como si de un amigo se tratara y en muchos casos lo era. Por eso conseguía testimonios increíbles de jugadores de fútbol, ciclistas, pelotaris y entrenadores, a los que solía atacar con aquel ‘¿Cómo está la gente joven?’. De hecho, futbolistas de la Real se acercaban a él para abrazarle y darle dos besos, Rubén Beloki le dedicó una txapela del Manomanista nada más conseguirla y había seguidores txuri urdin que pedían su autógrafo en las puertas de algunos estadios. Por todo ello, comenzó a renegar un tanto de su oficio cuando los departamentos de prensa le empezaron a alejar de los verdaderos artífices de la noticia.
Relator de anécdotas
Menudo personaje, Iñaki. Era partidario de disfrutar de su profesión y de los placeres de vida. Conocía al dedillo los mejores restaurantes de todos aquellos lugares a los que acudía su Real. Y reservaba mesa para todos aquellos plumillas y enviados especiales que quisieran apuntarse y degustar la especialidad del templo gastronómico y sus anécdotas, confesables e inconfesables. En ‘La Pepica’ de Valencia, el ‘Nou Manolín’ de Alicante o el ‘Adega O Bebedeiro’ de A Coruña no era difícil que el maitre le llamara por su nombre.
No era partidario Iñaki de viajar en avión, por lo grande de su humanidad. Y recorría la Península a bordo de un Fiat horroroso que él mismo denominaba el ‘Papamóvil’ o al borde del vehículo de gente de su confianza.
Xabi Alonso y la Real
Era una persona y un periodista que infundía respeto y que se ganó el cariño de todos. Por eso han sido decenas los mensajes de compañeros de profesión y deportistas que han mostrado sus condolencias a sus allegados y su tristeza por su fallecimiento a través de las redes sociales. Entre ellos, Xabi Alonso y la Real Sociedad: “Iñaki, gracias por hacer llegar a todos los hogares de Gipuzkoa a tu amada Real Sociedad. Querido por todos. Goian Bego”.
Goian bego, Iñaki, maestro.
Fuente: “El mundo deportivo”
