Iñaki de MujikaA la quinta, la vencida. la llegada del Elche de David Vidal permitió a la Real jugar el mejor encuentro desde el inicio del campeonato y ganar con autoridad, pese a que en los últimos minutos las cosas se pudieron complicar.
No soy muy del Festival. Más bien, nada. Me divierto viendo a la gente comprometida con su acreditación colgando del cuello y su bolsa, del hombro. Son una raza particular, como la nuestra, la futbolera. ¡Que si ha sido un peñazo, que si me he dormido, que si buen director de actores, que si…!. Cambiamos cine por estadio, balón por celuloide y las respuestas serán casi las mismas.
De lo visto hasta ahora me quedo con el escote de Espido Freire, que en lugar de dejar helados sus melocotones, paralizó a cuantos le miraron en su paseo por la alfombra roja. Luego, llegaron los "Fados" de Saura y el recuerdo de Amalia Rodrigues: "Numa casa portuguesa fica bem pão e vinho sobre a mesa". El resto, tiros, muertos, cañonazos, puntito julandreo y arrumacos.
El Elche se encontró de bruces con la pasarela y no tuvo cama en la que descansar sus huesos. Halló plazas a la vera del Bidasoa y se mojó todo lo que pudo en jornada de lluvias, que poco gusta a una plantilla amiga de soles y secanos. Por ahí, aparecía la posible ventaja. Con escenario húmedo, con actores conocidos y director postillón se inició el tercer argumento de Anoeta, conocido que las dos películas anteriores fueron calcadas y que el público las pateó y pitó, aburrido de diálogos pobres en contenido e imágenes vacuas en color.
"El fútbol está raro", apostilló Quique Sánchez Flores en rueda de prensa el pasado viernes. Y lo está. Gerardo, el denostado lateral derecho, es nuestro particular "Pichichi", por su acierto al ejecutar tres penales que tenemos en el zurrón de lo favorable. Antes abrimos brecha con un remate a lo "Pepe Hillo" que rompió las entrañas ilicitanas. Le abrazaron a Xabi Prieto que bordó lo que tocaba y que se merecía todas las lagoterías que en el mogollón se produjeron. La imaginación nos lo guarde.
"El fútbol está rarito", porque conserva a entrenadores del estilo Vidal que, entretener, entretiene. Dentro y fuera del césped. Hizo reír en rueda de prensa a la "canallesca", mientras Delibasic se bebía las existencias para llenar su vejiga y hacer pipí en el antidoping. También en esto somos diferentes. En Primera, dos por club. Aquí, uno. Será por ahorrar. Parece que cogemos aire, que Christopher ha elegido un equipo para hacer travesía. ¡Nueve puntos y a Jerez, con "X"!.
