Iñaki de MujikaIñaki Badiola ha propuesto a Miguel Santos proceder, en primera instancia, a realizar una ampliación de capital liberada de acciones de la Real Sociedad, sin coste para los actuales accionistas y sin contribución monetaria alguna, para posteriormente culminar la operación con un canje accionarial determinado entre acciones del San Sebastián Gipuzkoa Basket y acciones de la Real Sociedad.
Hubiera pagado pasta por haber estado sentado ayer en la mesa del Urepel. Lo de menos, pese a lo que pueda pensarse, era la comida. Hubiera pagado pasta por ver las caras de Iñaki Badiola y Miguel Santos en el anunciado mano a mano que se desarrolló en un ambiente cordial. Hubiera pagado pasta por asistir al momento culminante en el que el primer mandatario realista propuso al otro comensal la adquisición del Gipuzkoa Basket por parte de la Real Sociedad.
En las fechas de campaña electoral en las que Badiola ya era candidato y Santos se lo pensaba, o le obligaban a hacerlo, una comparecencia televisiva del hoy presidente fue un ataque despiadado a la figura del que no era ni contrincante. Se pasó y lo reconoció, porque al poco le envió un mensaje de disculpas a Miguel Santos después de la barbaridad dicha ante las cámaras.
Escribo esto, porque es necesario situar en el entorno de las relaciones de ambos el proyecto planteado. Iñaki Badiola ha propuesto a Miguel Santos proceder, en primera instancia, a realizar una ampliación de capital liberada de acciones de la Real Sociedad, sin coste para los actuales accionistas y sin contribución monetaria alguna, para posteriormente culminar la operación con un canje accionarial determinado entre acciones del San Sebastián Gipuzkoa Basket y acciones de la Real Sociedad.
Adicionalmente, la entidad txuri urdin se comprometería a incorporar dos jugadores de baloncesto de primer nivel, obviamente coordinándolo en todo momento con el entrenador, la dirección deportiva y el propio Presidente del GBC.
Esta idea no es nueva. Para ser correctos pertenecía al propio Miguel Santos que en la campaña electoral que mantuvo frente a la candidatura de Miguel Fuentes abogaba por un proceso similar al que ahora se plantea. Entonces la entidad de baloncesto no estaba constituida como sociedad anónima y el proyecto era más ambicioso y alcanzaba también al balonmano de Irún (Bidasoa).
Iñaki Badiola asegura que las sinergias de tal fusión por absorción del San Sebastián Gipuzkoa Basket serían enormes ya que la entidad resultante gozaría de dos equipos de primer nivel, bajo un sólo paraguas de club, en dos disciplinas deportivas, además de generarse economías de escala desde el punto de vista de acceso a accionistas, abonados y aficionados, recursos humanos, marketing, merchandising, financiación…
Obviamente, como única cláusula suspensiva de esta transacción quedaría la aprobación de la misma por parte de las respectivas Juntas Generales de Accionistas de ambos clubes.
Es el primer paso. En las próximas fechas asistiremos a las manifestaciones públicas de ambas entidades. Santos deberá presentar a su equipo dirigente los contenidos, beneficios y riesgos posibles de la operación. Badiola, que gobierna más fácil su cotarro, hará lo propio. La idea original partió de un lado y ahora llega desde el otro. Será hermoso asistir al proceso de arraigo o desarraigo de la propuesta. ¡Ver para creer!.
