elbeaterio.es

Los entrenadores se mueven a toque de clarín

La movida de entrenadores en Primera División alcanza cotas considerables. Muy superior a temporadas precedentes, pese a los logros deportivos que en algún caso se hayan podido conseguir, el baile no recuerda tantos precedente. Como si alguien hubiese tocado zafarrancho, los clubes se han vuelto locos a la hora de las contrataciones. Buen trabajo, por cierto, de los asesores-intermediarios.


El Real Madrid, campeón, mantendrá a Schuster en el banquillo. Lo mismo sucederá con el subcampeón, Villarreal, que hace tiempo renovó a Pellegrini. El tercero en discordia es el Barça. Cesado Rijkaard, la apuesta se llama Pep Guardiola, futbolista forjado en el espíritu culé, pero que accede a la gran competición con poco bagaje de experiencias.

 

Javier Aguirre tardó en asegurar su presencia en el ¡Atleti!. Pese a lograr colarse en Champions después de años con acumulados fracasos, el Manzanares llevaba aguas distintas. El nombre de Quique Sánchez Flores sonó con fuerza antes de recalar en el Benfica portugués.

 

Los puestos UEFA son para el Valencia que, vía Copa, accede a Europa por el único resquicio posible que le quedaba tras el estruendoso fracaso en Liga. Además de Quique S. Flores, el conjunto ché se llevó por delante a Koeman y Jose Mari Bakero, antes de que Voro dejase las fichas de delegado por las almohadillas de la tortura. Su paso testimonial por el banquillo deja abierta la puerta a Unai Emery, triunfador y máximo responsable en la excelente campaña del Almería.

 

Dicen que allí podía haber acudido otro de los grandes del campeonato, Marcelino García, quien ha hecho del Racing un milagro que llega a Europa. Por lo visto, las negociaciones y las exigencias no cuajaron y las puertas se abrieron así al de Hondarribia. Parecía que el asturiano podía continuar, pero se ha cruzado el Zaragoza, uno de los descendidos. Todo apunta a que Muñiz, peleando el ascenso con el Málaga, será el sustituto.

 

De la zona noble, de los equipos europeos, el Sevilla salvó los muebles después de un año trágico. Juande Ramos se fue al Tottenham y Manolo Jiménez asumió la responsabilidad. A trancas y barrancas alcanza el objetivo y la directiva le prolonga un año su condición de técnico. Lo mismo sucede con Gregorio Manzano que saca de su Mallorca rendimientos óptimos. ¿Para que cambiar si nos va bien?.

 

Los que se salvaron en el último momento renuevan. Lo han pasado tan mal que las directivas no se han atrevido a prescindir de ellos. Cuco Ciganda (Osasuna), Zambrano (Huelva), Mendilibar (Valladolid) iniciarán nuevamente la temporada. El Getafe pierde a Laudrup y no encuentra sustituto. Lo mismo le sucede al Espanyol. Valverde entiende que su ciclo termina y apuesta por una experiencia en Grecia (Olympiakós). El Almería apuesta por Gonzalo Arconada que pese a ascender con el Numancia cambia de aires. Sobre la mesa, ha firmado un contrato por dos temporadas.

 

Athletic y Depor dan por buena la temporada y el trabajo de sus preparadores. Así se entiende que Caparrós y Lotina renueven la confianza. La incógnita del Betis es permanente. Paco Chaparro salvó al equipo del descenso. En principio, el trianero debería renovar pero con Lopera por medio nunca se sabe.

 

Otro de los equipos sin técnico es el recién ascendido Numancia. La marcha de Arconada le descoloca. Rumores todos. Lo mismo que cuando Málaga, Sporting o Real Sociedad asciendan y deban adoptar soluciones con urgencia. El mercado en tiempos de crisis se mueve más que nunca. No quiero saber nada cuándo empiece a liarse en Segunda División.

Iñaki de Mujika