Se soltaron las riendas

El glamour de los encuentros de fútbol que se van a disputar desde este sábado opaca cualquier otra actividad deportiva y pone sordina a otras noticias que merecen cuando menos respeto. Liga. Copa, Champions. Todo entre dos. Son los llamados partidos del siglo que este año acumulan cuatro en dos semanas. Barça-Madrid hasta hartarnos.

Quiero, sin embargo, hablar de una mujer. Una esquiadora granadina, Maria José Rienda, ha decidido poner fin a su carrera deportiva con un palmarés que impresiona. Su trayectoria como en otros casos ha compaginado momentos estupendos con otros que no lo han sido tanto. Posiblemente, las lesiones le privaron de una hoja de servicios más dorada. Sus rodillas padecieron mucho. La derecha una triada (rotura de ligamento lateral interno, cruzado anterior y menisco). La izquierda, la rotura del ligamento cruzado anterior. Cuando se recuperó de la primera, le llegó la segunda. Pasaron dos años y luego no pudo volver a ser la misma, porque el tiempo no pasa en balde y deja cicatrices.

Dice adiós tras permanecer diecisiete temporadas en la elite. Olímpica en cinco ocasiones, debutó en Lillehammer”94 y se despidió en Vancouver 2010. En medio, numerosos campeonatos del mundo y suficientes podios, once en total, como para valorar y respetar su carrera, firmando en la disciplina de gigante sus mejores victorias.

Al concluir su vida deportiva convocó una rueda de prensa para hacer pública su decisión. Las lágrimas afloran en su rostro como tantas otras veces cuando un deportista mira hacia atrás y se encuentra con horas de entrenamiento, esfuerzo, sacrificio y muchas veces incomprensión.  El peso de la mochila cargada.

La frase con la que quiero concluir este comentario, resume su trayectoria:  "He luchado todo lo que he podido y me voy en paz conmigo misma". Existe una reflexión personal, una autovaloración del recorrido y una satisfacción final que no habla de victorias y triunfos sino de vivencia personal, de gozo por las cosas que han merecido la pena. La esquiadora granadina puede ahora soltar sus riendas.