Iñaki de MujikaCada vez que la Copa mueve bombos para sortear eliminatorias se crean expectativas dispares. Grandes, sobre todo, entre los equipos de Segunda “B” que han pasado la criba de las eliminatorias previas con la sana esperanza de que les toque un pez gordo.
Alavés y Éibar hicieron los deberes aunque en ambos casos necesitaran tirar de prórroga para salir enteros del envite. Borja Viguera y Jito llevaron la alegría al vestuario, a los aficionados y a las tesorerías de sus clubes, porque el bombo ha sido propicio con ellos y ha hecho realidad los sueños. Lo mismo que al Alcoyano tras verse emparejado con el Real Madrid..
El poderoso Barça volverá a Mendizorroza para jugar contra el Alavés y tratar de seguir camino en una competición que no admite errores. Han pasado muchos años desde que los de azulgrana no juegan en Gasteiz. De hecho, sólo Xavi y Pujol son los únicos que permanecen de aquel equipo.
Éibar y Athletic se felicitan cordialmente. Los gastos de competición van a ser mínimos. Les espera un paseo de pocos kilómetros. Ni hoteles, ni billetes de avión, ni restaurantes, ni nada. Sólo arbitrajes y el costo de abrir las instalaciones. Para la taquilla de Ipurúa, los rojiblancos son un buen reclamo, en tanto que, para el objetivo deportivo, los armeros no son mal enemigo para el objetivo de los de Bielsa.
Osasuna y Real Sociedad jugarán contra dos equipos de Segunda División, con el primer encuentro fuera de casa. Ni el Sporting, ni el Córdoba son rivales que en principio deban sorprender. Los asturianos acaban de cesar a su técnico pese a clasificarse y los cordobeses, aún jugando bien al fútbol, no tendrían que impedir la clasificación realista.
Esa es la teoría que cabe en este o en cualquier otro comentario. Pero si hay un torneo plagado de cataclismos es la Copa, el torneo del K.O. que a lo mejor no da demasiado hasta casi el final, pero que en el camino crea unos problemas enormes. Y si no que se lo pregunten a Schuster cuando, después de caer eliminado en el Bernabeu por el Real Unión, fue cesado.
El emparejamiento de unos y otros impedirá que a la final lleguen los dos mejores equipos, o al menos los más poderosos. Si deben coincidir, Real Madrid y Barça lo harán en semifinales, así que a algún otro le va a tocar en suerte disputar la final, pero hasta que eso llegue…los más pequeños disfrutan de su suerte con esta lotería de octubre.
