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Route 33 Gourmet

Nos sentamos a la mesa del Route 33 Gourmet en Hondarribia. No sabría cómo definir estas instalaciones en las que conviven la restauración de bar, terraza, cafetería y restaurante, junto a una muy seleccionada oferta de vinos y una tienda delicatessen, además de una panadería en la que encuentras una amplia y variada posibilidad de elección. Panes recién horneados, bollería, heladería, pastas, tartas y pasteles; charcutería, sección gourmet y la vinoteca con 200 referencias seleccionadas. 

Habíamos quedado para hacer un programa de radio y luego comer todos juntos. Desde el palista, ya retirado, Alex Sánchez, culpable del encuentro, hasta el futbolista Joseba Llorente, el ciclista Patxi Vila, los remeros Txalo Carrión y Julen Castrillón y una máquina del trialsin llamada Ion Areitio, subcampeón de Europa pese a la enorme juventud que atesora. Andaban por allí algunos curiosos como Endika Pikabea, Ander Arrieta y su esposa Ana, además de clientes y personas de la casa.

Hablamos de muchas cosas. Desde la tecnología del ciclismo aplicada a bicicletas especializadas como la de Nibali, hasta los entrenamientos exigentes de unos remeros que se están jugando la posibilidad de ganar una bandera que encumbra como la regata de La Concha. Luego, están las trayectorias que ahí quedan para quien desee analizarlas y valorarlas. Joseba Llorente recordó anécdotas y momentos vividos a lo largo de los años. Areitio, recién llegado de los mundiales de Sudáfrica, enseña el camino de los grandes esfuerzos para alcanzar metas.

Retirados los micrófonos, Felipe Gonçalves, responsable de los fogones, nos animó con su propuesta culinaria: unos pintxitos de txistorra, platos de jamón, un surtido amplio y variado de mariscos, además de unos hongos salteados con yemas de huevo y txuletas con patatas y pimientos hasta hartar. Viña Izadi, y queso con membrillo. Café.

Uno de los responsables del proyecto, Ricardo Postigo, nos animó a disfrutar de la terraza y de unas copas bien servidas, acompañadas de pastas que prolongaron la velada hasta donde hizo falta. Según las exigencias y compromisos, los comensales se fueron retirando poco a poco. Quien esto escribe fue el último en levantarse. Cuando no hay prisa y se disfruta…

Iñaki de Mujika