Los meses primaverales de 1986 transcurrieron con cierta tranquilidad. La ciudad bullía cultura. El ayuntamiento sacaba adelante sus presupuestos. Se adjudicaban las obras finales del polideportivo y se avanzaba en la preparación del próximo curso escolar y de los sanmarciales. El cierre patronal de Porcelanas Bidasoa se erigió como el principal sobresalto.
Y hablando de erigirse, parte del tronco del pino navideño que había adornado las fiestas irunesas en la plaza de San Juan, permanecía erguido meses después dando lugar a diversas especulaciones. Lástima no poder preguntarle cuales.
Respecto a San Marcial, ese mes de mayo, en acuerdo con el museo del ejército, se eligieron los cañones que sustituirían a los de Lesaka a partir del alarde del ’87 y, en consideración al tremendo despliegue que supone para las cantineras ser elegidas, Iñaki titulaba: “La movida sanmarcialera”. Para movidas, las que vinieron después.
Desde finales de 1983 hasta 1987, Iñaki de Mujika, trabajó para el diario Deia como corresponsal de Irún, redactor de deportes y ocasional crítico taurino. Su estilo narrativo, su sentido del humor, su interés por el deporte de base y su particular manera de entrevistar; se aprecian ya en estos primeros artículos.