Iñaki de MujikaColeman ha decidido que su presencia en la Real Sociedad como entrenador no debe prolongarse ni un minuto más. Por eso, ha presentado su dimisión y decide volverse a Gales, su país de origen. La diferencia de criterio, opinión y proyecto con el actual presidente, Iñaki Badiola, se convierte en el detonante de la resolución. En una comparecencia pública ha leído una nota, tras la cual no ha aceptado un turno de preguntas:
"Dimitimos como entrenadores de la Real Sociedad y dejamos los cargos con mucha tristeza porque es un club fantástico. Las cosas han cambiado con la llegada del nuevo presidente Iñaki Badiola porque hay ahora dos modos diferentes de ver el club y trabajar", resumió en sus palabras el ya exentrenador realista.
Concluye así un breve periplo del técnico que, a día de la fecha, deja al equipo colocado a un punto de los puestos de ascenso a Primera División. Los comienzos no fueron fáciles puesto que perdió en su campo los primeros partidos ante Castellón y Poli Ejido. El equipo ha funcionado mejor lejos de Anoeta, una de sus asignaturas pendientes. Le trajo una directiva y se marcha con otra. A Coleman le han desaparecido todos los apoyos, excepto el de sus jugadores, principales valedores a los que ha agradecido su apoyo, particularmente al capitán Mikel Aranburu. Hace pocos días afirmó que permanecía en el club por ellos, pero poco después decide marcharse, cuando le quedaban dos años y medio de contrato.
Coleman ha deseado lo mejor para el futuro del club y de la persona que ocupe su puesto. Renuncia a cobrar los emolumentos pendientes, lo que constituye una decisión honesta, "rara avis" en el fútbol. Juan Carlos Oliva será su sustituto, otro técnico de prestigio y con comportamientos dignos de ser destacados. Viene de la mano de Ramón Planes, llamado a ser nuevo secretario técnico de la sociedad, tras el cese de Salva Iriarte. Ambos son hombres que conoce Pako Ayestarán y que saltarán a la palestra más pronto que tarde. El futuro deportivo del club y toda la organización se estructurará en torno a estos profesionales.
Las hemerotecas recogen el paso de Oliva por el banquillo del Alavés. En un rueda de prensa, cuando Piterman le cesó expuso que: "No podía aceptar" la imposición del presidente porque soy entrenador por encima de todo, con unos principios a los que no está dispuesto a renunciar. El lunes me intentó variar el planteamiento del partido del sábado, y yo eso no lo puedo aceptar. No había tenido ninguna imposición antes. Ahora sí. Antes de que Oliva tuviese que optar, Dimitry ha tomado una decisión. Como me ha dicho Dimitry, mi autonomía ha durado mientras ha estado de acuerdo con lo que yo he hecho. Cuando no ha habido acuerdo, se ha acabado la autonomía",
En esa línea de comportamiento debe entenderse también su marcha del Aris de Salónica, el conjunto griego que le fichó al principio de esta temporada: "El vicepresidente de ese club por entonces, Manuel Ferrer, apostó por mí y fui muy ilusionado porque era un equipo que disputaba Copa UEFA. Trabajé nueve semanas al mando del equipo, pero sorprendentemente Ferrer discutió con el presidente y decidió desvincularse, con lo que yo también consideré adecuado irme ya que había llegado por su gestión".
En la actualidad es el responsable del filial del Villarreal y del acuerdo de todas las partes afectadas dependerá la confirmación de Juan Carlos Oliva como responsable de la primera plantilla realista con la que, muy probablemente, viajará a Córdoba.
